O Europa o nada, es la consigna de los migrantes que para las leyes irracionales occidentales, en este caso de Europa, son migrantes “ilegales” pero como dicen algunos académicos, los movimientos de dineros son libres menos las personas.
A una mujer migrante “ilegal” que cruza las selvas del Darién un periodista le pregunta sobre los motivos de su arriesgada travesía a lo que responde que lo hace por su hija, algo así como para que tenga un futuro mejor cuando lleguen a los Estados Unidos, reconociendo al mismo tiempo que deberá sortear una serie de peligros para cumplir su objetivo.
Pero cada vez mueren más y más de esos migrantes denominados ilegales, cada son personas que van en grupos supuestamente para sentir la sensación de protección pero que a la larga todos al mismo tiempo sufren las mismas adversidades.
No valen las humillaciones de los gobiernos, las humillaciones de los coyotes, las humillaciones de tantas personas desalmadas que se encuentran en el camino.
No valen las deportaciones de miles de personas, no valen las advertencias severas de las autoridades, no valen las encarcelaciones de cientos de migrantes, nada de esto vale.
No valen las pérdidas económicas de los migrantes, ni nada de todo tipo de sufrimientos que bien saben que están expuestos cada minuto que caminan por su anhelado sueño.
Todo porque los motivos que los obliga a realizar este tipo de travesías son razones suficientes para exponerse a tantos peligros, sino a que los devuelvan.
¿Acaso hay un sentimiento suicida en estas personas? ¿Acaso no les importa sus propias vidas y las vidas de las personas (incluidos los niños que llevan)? ¿Acaso están resueltos a morir en cualquier momento? ¿Habrá alguna explicación psicológica para estos tipos de comportamientos? ¿Por qué cada vez hay más personas que se contagian de ese tipo de sentimientos suicidas?
Nunca me podré explicar, por más que me repitan una y otra vez que la situación social y económica los obliga a ello, porque insisten en cometer suicidio colectivo.
Porque el hecho de que algunos logren sus objetivos, los africanos que llegan a Europa y los latinoamericanos y caribeños que llegan a Estados Unidos, solo para mencionar los casos más conocidos, no significa que todos lo logren, es decir, los que logran llegar es casi como haber ganado la lotería.
Lo importante es replantear el valor de la vida por encima de cualquier razón que implique riesgo humano. Replantear el concepto de éxito, replantear la noción de oportunidades y progreso, porque a veces todo ello en el fondo puede representar un engaño.
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